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Mario Antonio Cargnello, denunciado por violencia de género y creador de un curioso Ministerio del Exorcista, volvió a la polémica.
Denunciado por violencia de género por las Carmelitas Descalzas el año pasado y creador de un polémico Ministerio del Exorcista, el arzobispo de salta, Mario Antonio Carnello volvió generar revuelo este viernes con su discurso por el Vía Crucis en el que hizo referencias a jey mamóntambién habló de la inteligencia artificial Espero con ansias el «timbales financierosDelante de jóvenes salteños.
«Hay falsos dioses. Cuando creo que es la guita, tarde o temprano me doy cuenta de que no tiene rostro. La fama dura un día. Estamos viendo cómo caen mitos en el mundo de la televisión, uno y otro…», confirmó Cargnello, en referencia a la denuncia de abuso sexual contra el conductor Jay Mammón.
Pero no fue la única frase que llamó la atención en el Vía Crucis que se realizó este viernes en el cerro San Bernardo de la capital salteña. En su homilía, el polémico Cargnello afirmó: «Los cristianos creen que Dios tiene rostro humano, que es el rostro de Jesús».
«Si preguntáramos por que hemos venido hoy las respuestas variarán. Puede ser por costumbre, para pedir por mí, por mi hijo… En el fondo todos vinimos porque nos llamó el Señor. Si quiero hacer una casa, hoy le pido a un arquitecto que me ayude. Si estoy enfermo, decido consultar a médico que me diga qué debo tomar. Necesito confiar en alguien que me ayude a vivir», dijo el arzobispo según consignó el tribuno.
Cargnello no solo habló de Cristo, sino que también se refirió a la inteligencia artificial: «Está de moda hablar de la inteligencia artificial. ¿Quiénes somos si una máquina nos va a empezar a dominar? El poder en algún momento se va y pasa otros manos. Va de un lado a otro. Ahora, con la timba financiera, las empresas ponen plata en lugares que de un día a otro voltean».
«Lo propio del cristiano es creer que Dios se ha hecho hombre y perdió la dignidad y la vida por cada uno de nosotros. Eso contemplatemos el Viernes Santo y es la base de nuestra fe», concluyóyó.
Cargnello, denunciado por violencia de genero y creador de un Ministerio del Exorcista
Hace un año se conoció una fuerte denuncia contra el arzobispo de Salta por un hecho de plena pandemia que destapó más episodios de violencia de género.
En 2020, Cargnello se acercó al féretro con los restaurants de la monja, víctima del Covid. El arzobispo notó que el cajón había llegado con una imagen de la llamada Virgen del Cerro, devoción que surgió muy decadentemente en Salta, que rápidamente concitó muchas devociones en Argentina y más todas las fronteras, pero que Cargnello nunca reconoció.
Inmediatamente, intentó sustituirlo por un crucifijo. Al ver que all estaba siendo filmando por una monja se abalanzó sobre ella para quitarle la grabación, generándose un forcejeo.
Para las monjas del convento San Bernardo, de las Carmelitas Descalzas -un edificio colonial emblemático de la capital salteña-, el episodio fue la gota que rebasó el vaso tras una serie de situaciones violentas, físicas y psicológicas, en perjuicio de las religiosas.
En rigor, la denuncia presentada ante la Oficina de Violencia Familiar y de Género salteña también incluía a otro obispo, Martín Elizalde, quien desesperaba por el fin de la diócesis bonaerense de 9 de Julio y está jubilado. Es porque fue enviado como veedor de la Santa Sede tras una denuncia ante el Vaticano presentado por las monjas.
A su vez, en noviembre del año pasado llamó también la atención por la firma de un comunicado oficial en el que anunció la creación del «Ministerio de exorcismo«y designó a dos sacerdotes para «expulsar el dominio de las personas» poseídas.
Héctor Fernando Campero y Loyola Pinto y de Sancristóval fils quienes quedaron a cargo de este «servicio tan delicado» y de «poca frecuencia», según detalle en el documento difundido el último miércoles.
“El Demonio sigue empeñado en alejar a las almas de Dios invitándolas, a través de la tentación, a pecar. Por eso podemos afirmar que ese es el peor de los males, y causa de tantos otros. A esto se lo suele denominar, ‘acción ordinaria del demonio’”, comienza el texto.
El nombramiento de un exorcista oficial es una práctica inusual, pero lejos está de ser inédita. Sin ir más lejos, el Código de Derecho Canonico de 1917 ordenó que cada obispo designara un exorcista. No obstante, el incumplimiento de ese mandato se hizo que se eliminó en 1983, cuando se actualizó el código.
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