Cuando puso por primera vez sus tenis (talla 49.5) en un piso de la NBA en 2003, LeBron James tenía apenas 18 años, había terminado la escuela secundaria y vio apodo «El Elegido» – » El elegido « – adjunto a su nombre. El chaval de Akron (Ohio), todo un fenómeno de la precocidad, cargaba entonces sobre sus hombros las esperanzas de la liga norteamericana de baloncesto, que buscaba un heredero para la superestrella Michael Jordan.
Veinte temporadas después, los hombros del que ahora responde al apodo de «King James», el rey, se han desarrollado, al igual que su palmarés. Con 36 puntos anotados ante Oklahoma City Thunder, el jugador de Los Ángeles Lakers superó este martes 7 de febrero la marca de 38.387 puntos de su carrera, desbancando a Kareem Abdul-Jabbar del trono de máximo anotador en la historia de la NBA.
El extremo de los Lakers se quedó a solo 36 puntos de la mañana del partido de borrar una marca de la que hablaba, a finales de enero, como «uno de los mejores récords del deporte en general, uno que no crees que se rompa jamás».
El exjugador de los Lakers, ahora hijo Kareem Abdul-Jabbar, ostentaba la corona desde el 5 de abril de 1984, cuando destronó a Wilt Chamberlain, antes de aumentar la marca durante cinco temporadas. El martes, en Los Ángeles, en el Crypto.com Arena, antes llamado Staples Center, LeBron James se convirtió en el único poseedor del récord al registrar sus 36mi punto de la tarde en los últimos segundos del tercer cuarto del partido ante los Thunder.
Aterrizó en la NBA con la atención puesta en él como ningún otro jugador antes que él, respondió LeBron James. Drafteado en primera posición en ese momento -la selección por la que los clubes de la NBA distribuyen a los mejores jugadores jóvenes- por los Cleveland Cavaliers, el jugador nacido en Ohio se convirtió rápidamente en la cara de la NBA. «Gracias a Dios no tenía redes sociales en ese entonces, eso es todo lo que puedo decir»confesó el jugador, en octubre de 2022, sobre su llegada a la Liga, de la que ganó cuatro veces el campeonato.
Si tuviera derecho, todavía estudiante de secundaria, a una portada de la prestigiosa Deportes Ilustradosy un incesante ballet de cámaras y cámaras a su alrededor, LeBron James no era entonces objeto del permanente auge de las redes sociales -solo debía enfrentarse el francés Victor Wembanyama, esperado el próximo año como la futura gran estrella del basket-.
La promesa hecha en Cleveland
Desde su primer partido, en octubre de 2003, LeBron James asumió sus responsabilidades. “Estaba asumiendo toda la presión del mundo, ya que la gente asumía que él era el próximo Jordan. El chico del «Elu» tatuado en la espalda, y a pesar de eso, supera las expectativassu excompañero de los Cavaliers, Kevin Love, comentó esta semana. Cada vez, en la adversidad, encontró su camino, aspirando a la grandeza. »
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