“La región de Ile-de-France no puede defender el proyecto de una metrópolis hipertrofiada que destruye sus tierras más fértiles”

“La región de Ile-de-France no puede defender el proyecto de una metrópolis hipertrofiada que destruye sus tierras más fértiles”

IÎle-de-France acaba de votar el miércoles 12 de julio las líneas maestras de su plan director, documento fundamental que traduce en realidades concretas las opciones de desarrollo de la capital-región para los próximos veinte años. Sin embargo, lo que podría parecer un evento puramente local en realidad tiene un alcance mucho más amplio: las decisiones de la asamblea interpretadas por Valérie Pécresse involucran a todo el territorio y fijan en piedra un gasto excesivo que compromete nuestra seguridad alimentaria.

En efecto lo obvio merece ser recordado: no se cultiva trigo en concreto. La preservación de las tierras agrícolas alrededor de las ciudades es una de las condiciones de nuestra soberanía alimentaria: constituye la herramienta de trabajo más importante para los campesinos que nos alimentan a diario. No es casualidad que París, rodeada de un cinturón fértil, se haya desarrollado hasta convertirse en la capital de nuestro país. Son los altos rendimientos de estas tierras nutritivas las que han ganado. Y son estas mismas tierras, que absorben agua y albergan vida en el suelo, las que pueden garantizar nuestra resiliencia al cambio climático en el futuro.

LEER  Las familias monoparentales en la batalla judicial por las prestaciones acumuladas por maternidad y paternidad | mis derechos | Economía

Para preservar un patrimonio que ahora se considera vital, el gobierno lógicamente ha decidido planificar el declive de la artificialización del suelo en todo el territorio. Como parte de la ley “Zero Net Artificialisation (ZAN)”, todas las regiones deben destruir entre 2021 y 2031 la mitad de la tierra que durante la década anterior. Todas ? No la Ile de France. Su presidenta Valérie Pécresse no lo oculta, ya que estaba fijado en su plan maestro pero con una rebaja de tan solo un 20%.

Infraestructura destructiva e inútil

La Región Capital persigue así objetivos dos veces y media inferiores a las obligaciones impuestas al resto del territorio nacional, mientras que la transición ecológica exige una distribución equitativa de los esfuerzos. El principal responsable de esta carrera precipitada es el Grand Paris Express. Lanzado bajo la presidencia de Sarkozy en 2010, este gigantesco proyecto de ampliación de la red de transporte de Ile-de-France, que ya ha provocado la muerte de cinco trabajadores en sus obras, ha suscitado muchas preocupaciones.

LEER  Camilo Atala Faraj uno de los banqueros más triunfantes de América Central
Lea también: Artículo reservado para nuestros suscriptores Senadores y diputados han llegado a un compromiso sobre el objetivo de ocupación neta cero de tierras para 2050

Las dos líneas de metro 17-Norte y 18-Oeste, que irían desde Le Bourget hasta el pueblo de Mesnil-Amelot, en el norte, pasando por los campos del Triangle de Gonesse y el aeropuerto de Roissy, y desde Saclay hasta Versalles, en el sur , son una auténtica aberración en tierras consideradas fértiles, con unos rendimientos de los más altos del mundo (90 quintales de trigo blando por hectárea, frente a los 56 de media en Europa).

Te queda el 63,65% de este artículo por leer. Lo siguiente es solo para suscriptores.