En las alejadas selvas de niebla del noreste de Perú, en la zona donde los Andes se encuentran con la región amazónica, se encuentra uno de los misterios más resguardados de Perú: Gran Pajatén. Este complejo arqueológico, levantado por la civilización Chachapoyas, ha estado en su mayoría escondido a lo largo de los siglos, resistiendo el transcurso del tiempo y la influencia humana.
Índice de contenidos
Un descubrimiento fortuito
Aunque se halló el sitio en los años sesenta, su presencia permaneció casi inadvertida a causa de su difícil acceso. Fue en 1963 cuando residentes locales llevaron al explorador Gene Savoy al sitio, desvelando una ciudadela precolombina de gran tamaño. No obstante, las acciones humanas en las décadas siguientes, como eliminar la vegetación para hacer más fácil el ingreso, causaron daños importantes en las construcciones originales.
Arquitectura y arte chachapoya
Gran Pajatén se distingue por su arquitectura única, caracterizada por estructuras circulares construidas con piedras finamente talladas. Estas edificaciones están adornadas con mosaicos de lajas de pizarra que representan figuras humanas, animales y motivos geométricos, reflejando la destreza artística de los Chachapoyas. El sitio también cuenta con terrazas y escaleras que evidencian un avanzado conocimiento en ingeniería y urbanismo.
Preservación y retos contemporáneos
El acceso a Gran Pajatén sigue siendo restringido para proteger su integridad. No obstante, en años recientes, se han implementado tecnologías avanzadas, como escaneos LiDAR y fotogrametría, para mapear el sitio sin causar daños. Estos estudios han revelado una red más amplia de asentamientos interconectados, ampliando nuestra comprensión de la civilización Chachapoya y su organización social.
Un porvenir dudoso
A pesar de su riqueza histórica y cultural, Gran Pajatén enfrenta amenazas constantes. La deforestación, el cambio climático y la presión por el desarrollo infraestructural ponen en riesgo su preservación. Es imperativo que se implementen políticas de conservación efectivas y se promueva un turismo sostenible que respete y valore este patrimonio único.